
Preguntas para autobservarme y aprender de mí.
Comentario de José Parés Pérez. Concepción, Chile
¿Cómo se expresa lo que llamamos MADUREZ?
Todo fruto o representante de la naturaleza se considera maduro cuando ha alcanzado a condición en que expresa a plenitud todas y cada una de sus potencialidades.
La madurez del hombre se mide, en consecuencia, en el grado en que ha desarrollado su capacidad de mayor trascendencia como es la de relacionarse. Habrá signos de madurez en el hombre a diferentes edades en que aparenta estar preparado para algunos otras funciones que nos son naturales. Pero la capacidad para convivir, de lograr la vida en comunidad, de ser capaz de dejar de lado los conflictos tanto internos como externos es la más alta demostración de MADUREZ.
La vida en soledad, si bien puede parecernos muy atractiva, es una demostración de que no hemos logrado aceptarnos a nosotros mismos y a los demás coherentemente para vivir en la necesaria armonía.
Convivir es una forma de vida que puede ser considerada difícil si no estamos preparados para aceptar al otro tal cual es. Con frecuencia no nos aceptamos ni siquiera a nosotros mismos y vivimos una vida de juicios y culpas. Aunque viva en soledad y mucho menos si vive conviviendo con otro, si no se acepta a sí mismo está destruyendo su vida y la de los que lo rodean.
Puede decirse que mientras no ha terminado de conocerse, aceptarse tal cual es, dejar de resistir a lo que no le agrade de Ud. y de los demás, no ha terminado de madurar.
Le falta ponerse atención para autobservarse e iniciar un proceso de maduración que le reportará los beneficios que nuestras vidas ameritan. A menos, claro está, que le importe un rábano lo que suceda con los demás, demostración de la más cruda inmadurez.