¿La sensación informa?

Contribución de Isabel Hernández Negrín de Las Palmas de Gran Canaria, España

A mí me parece que la sensación es de lo más fiable como señal de nuestro estado. Ojo que hablo de la sensación y no de lo que pensamos o imaginamos sobre las sensaciones.

Sin embargo, poco atendemos a nuestras sensaciones. Le damos mucha más importancia a las conclusiones que sacamos o a lo que suponemos a partir de las sensaciones. Cuantas personas conocemos que son muy aprensivas y cuando les duele algo (sensación) rápidamente piensan que es un cáncer, o sea, piensan que se van a morir.

La sensación nos informa de que algo está pasando en nuestro interior o en el exterior. Puede que estemos especialmente tensos y nos duela la cabeza y pensamos en un tumor; puede que haya comido algo que me produce muchos gases y me duele tremendamente durante horas cerca del estómago y ya tengo una pancreatitis; puede que tenga tensiones musculares alrededor de esternón e inmediatamente imagine que se anuncia un infarto.

Me fío de la sensación, ella me informa de algo que está sucediendo.  Ese algo puede ser una incógnita para mí porque rara vez presto atención a las sensaciones. Pero cuando decido prestar atención a las sensaciones y no darle importancia a la imaginación, poco a poco, voy comprendiendo su lenguaje y su mensaje. Voy sabiendo lo que puedo aportar para mejorar mi salud y bienestar. 

Fíate de las sensaciones, presta atención a ellas sin temor, sin imaginar más allá de la sensación. No hay nada más honesto que la sensación. Atender a ellas afianza tu presencia y te da fortaleza. Si no lo crees, prueba!

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