Preguntas para autobservarme y aprender de mí.
Comentario de José Parés Pérez. Concepción, Chile
El egocentrismo es una tendencia preponderante en el comportamiento humano. Nacida probablemente del temor del hombre ante la incertidumbre, ante la muerte, ante la imagen que genera en los demás, ante la pobreza, ante la soledad, ante la vida en general, nos genera una conducta egoísta como reacción a esos temores.
La conducta egoísta, nacida de la tendencia egocentrista que nos domina, envenena toda nuestra vida. Nuestras relaciones, nuestras comunicaciones con los que nos deberían importar se tornan tóxicas y la separación o fragmentación de la humanidad es el natural resultado.
Un grupo de personas se transforma en un equipo o conjunto ejecutivo cuando todos participan hacia el objetivo común sin egoísmo en sus entregas. Cualquier elemento de ese conjunto que interponga su egoísmo en las relaciones con el grupo contaminará al equipo con el lógico y esperado daño en los resultados.
¿Cuál es el tipo de relación que sueles tener con los demás? ¿Te has observado para detectar si hay egoísmo de tu parte en algunas de tus relaciones? ¿En tus relaciones transaccionales, en las que se trata de un intercambio justo entre lo que das y lo que recibes a cambio, actúas con equidad o intentas obtener el máximo beneficio? ¿Cómo te aseguras que en este tipo de relación, están siendo justos contigo? ¿Mantienes alguna relación claramente no transaccional, basada en tu entrega? ¿Por qué crees que es de ese tipo? ¿Hay en esta relación alguna manifestación de egoísmo de alguna de las partes? ¿Has hecho algún esfuerzo por sanear esa relación que ciertamente está siendo dañada por el egoísmo presente en ella?