¿Cuándo la risa es coherente con la alegría?
Comentario Isabel Hdez., España
Cuando no hay resistencias la risa sueña cantarina y poderosa. Como la propia expresión de la vida sin condiciones ¿Qué resistencias o qué condiciones? Las hay de todo tipo, pero veamos alguna. A veces tenemos ideas que nos limitan y pueden ser muy superficiales, como que tengo unos dientes feos, o una sonrisa poco agradable. Puedo tener el pensamiento de que reír es solo para la intimidad, o que la alegría puede ser tomada con flaqueza o debilidad y que es preferible aparecer como alguien serio y fuerte. Otros pueden creer que tienen motivos personales para estar siempre tristes. Otros creen que no hay motivos para la alegría y la risa en este mundo lleno de problemas y desgracias. Incluso los hay que a los que ríen mucho los consideren personas poco responsables, ignorantes de lo que es la vida.
¿Te has fijado que todo lo que he mencionado son pensamientos? ¡Tenemos pensamientos que nos impiden reír! Fíjate que un pensamiento condiciona cómo te sientes, emocionalmente. ¿Habrá cosa más tonta? Pero así suele ser. Pero los pensamientos se pueden cambiar ¿acaso no has cambiado nunca una opinión?
Te propongo que hoy descubras si hay algo dentro de ti que limita tu risa y tu alegría. Mira ese pensamiento limitante con toda tu atención y examínalo bien. ¿Es algo que habla con la verdad? ¿Es algo que tiene sentido hoy? ¿Es algo necesario en mi memoria? ¿Me sirve de algo bueno para mi desarrollo integral? ¿Es útil a mis relaciones? Si las respuestas son mayoritariamente NO, observa esa resistencia, describe lo que es, acepta que eso estuviera ahí, y luego, con respeto y afecto, haz un gesto dentro de ti que permita que se vaya. Ganar conciencia sobre nuestros pensamientos limitantes nos dará mucha risa!