Preguntas para autobservarme y aprender de mí.
Comentario de José Parés Pérez. Concepción, Chile
El ser humano tiene una capacidad increíble para crear realidades inexistentes. Es tan robusta su capacidad para inventar que se le hace difícil diferenciar los hechos de la realidad imaginaria que ha creado.
Es tremendamente importante aprender a diferenciar claramente los tiempos que puedes vivir o inventar gracias a nuestra capacidad de recordar, imaginar, temer y desear.
Caminas tranquilamente por la calle disfrutando la vista de las arboledas y de las bellas damas que se cruzan en tu camino. El paisaje es bello pues la reciente lluvia ha limpiado el aire y puedes distinguir los detalles de los lejanos cerros. Estás contigo en tu PRESENTE. Sin embargo, por la reciente lluvia pisas una baldosa suelta y ha entrado agua en tu zapato. Eso también es PRESENTE pero inmediatamente, PASADO. Tienes dos opciones: aceptas que ya es PASADO y que nada puedes hacer para evitarlo y retomas tu PRESENTE al continuar caminando disfrutando de tu vida. La otra opción: cambias ese bello presente por el sentir en el PRESENTE la molestia y desagrado que te produjo el PASADO que ya no existe. Sigues caminado pero ya no disfrutando sino lamentando el PASADO ya inexistente y al que mantienes en tu rico PRESENTE desperdiciándolo.
Un poco más adelante en tu caminar, tras una probable reacción airada y manifestación de juicio y condena hacia los responsables de mantener las calles en buen estado, tu pensamiento te lleva ahora a otro tiempo inexistente, el FUTURO. Has dejado de admirar la belleza que te proporciona esta realidad que habitamos en nuestro PRESENTE porque ahora estás muy atento a que no te vuelva a pasar en el FUTURO, tiempo que aún no ha llegado, lo que te acaba de pasar en tu PASADO.
El mecanismo automático descrito no es muy natural pero nocivo. Aplicado a otras realidades puede llegar a sernos exageradamente dañino. Gran parte de las enfermedades que soportamos en la vida se deben a permitir que esa forma no consciente de reaccionar a las realidades sea la rutina en nuestras vidas.
Sólo el PRESENTE es cierto, el PASADO y el FUTURO sólo son productos de nuestros pensamientos. Una forma de trabajar para lograr claridad sobre los hechos que nos presenta la vida, es practicar el observar los hechos tal como son; sin enjuiciarlos ni a ellos ni a nosotros y menos a los demás; sin interpretarlos sacándolos del contexto del tiempo en que se producen.