¿La vida se estrena a cada instante?
Comentario de Isabel Hdez. Negrín, España
En realidad soy yo quien vive como nuevo cada instante. Y así todo toma un color más vivo, pintado con una belleza que está en mi mirada.
Pues cuando paso mi vista sobre algo, pero mi cabeza está en otra cosa, o está pensando en lo que veo, ya no miro con ojos nuevos. Estoy mirando con la memoria y si veo una pila de platos en la cocina quizás me irrite que alguien no la haya colocado antes. O simplemente mire la pila de platos y sólo sienta la responsabilidad mía de guardarlos en su lugar y mantener el orden que creo que debe existir.
La vida la veo como nueva, cuando no me centro en pensamientos sobre lo que percibo. Los juicios, opiniones, o cualquier otro tipo de operación en el camino más directo de lo que percibimos, nos aleja de ello y nos cambia lo que sentimos.
Por si alguien está pensando que esto sería mirar como un tonto, le diré que no es así, pero que antes de opinar sobre una experiencia que no tiene debe tener la experiencia, insistir en la experiencia y luego podremos hablar de la experiencia y no de lo que pensamos u opinamos a priori de la experiencia.
Así que pon en práctica este truco. Observa sin emitir o mezclar juicios, opiniones o sentencias sobre lo que percibes. Déjalo que sea como es. Observa sin interferencias dándote cuenta de que estás observando. Hazlo con cualquier cosa o persona que se te cruce. Oportunidades no te faltarán. Incluso tendrás la ocasión de verte enfadada o impaciente con lo que sucede; pues observa tu enfado o tu impaciencia, sin decir nada sobre ellos. Nada de nada. Hazlo y no te rindas.