¿El tiempo de vivir es Aquí y Ahora?
Comentario Isabel Hdez., España
La expresión de vivir aquí y ahora puede sonar a vivir de una forma poco responsable, sin pensar en las consecuencias de las acciones, a falta de compromiso. Se relaciona con la satisfacción inmediata de alguna necesidad, o mejor aún con la búsqueda del placer instantáneo por encima de todas las cosas. Esto sería, más bien, perder el tiempo de la vida en búsquedas que no generan desarrollo ni crecimiento personal. Aquí no nos referimos a eso.
Vivir con nuestra mente atenta en el instante presente no es cosa habitual. La atención en el instante, y especialmente en lo que dentro de mí acontece, necesita un propósito y una elección renovada del propósito en cada instante. Eso es algo que nos cuesta un poco porque nos despistamos fácilmente. En lugar de ser dueños de nuestra atención es ella la que va errante detrás de lo que más llama su interés. Y así quedamos atrapados en los pensamientos, que son refritos del pasado y de posibles planes o simples ensoñaciones sobre futuros agradables o temidos.
Al no ser dueños de nuestra intención ni de nuestra atención vivimos distraídos entre el pasado y el futuro, que son sólo una película, de cine mudo o de ciencia ficción, pero una película, y el presente queda para hacer cosas como trabajar, movernos y huir de nuestros problemas. El presente es un lugar peligroso cuando lo que hace es huir de sus conflictos. En el presente, cuando quedo solo en el instante silencioso, siento que me asaltan los fantasmas de las cosas por resolver dentro de mí. ¿Qué hago entonces? Hacer cosas para ahuyentarlos: ver la TV, hablar con amigos, hacer cosas en casa, entretenerme con algún hobby, hacer mucho deporte. El presente es el peor momento porque no solemos ser amigos de nosotros mismos, somos un casi desconocido en el que adivinamos problemas.
Sin embargo, cuando aprendemos a vivir en ese tiempo por más tiempo y a poner el foco de la atención sobre nosotros con ganas de descubrir e indagar, algo se ilumina y ese momento se vuelve interesante. Más tarde puede que además de interesante nos ayude a conocernos mejor y comprender el origen y arreglo de nuestros conflictos.
Para tener una vida más completa, en paz y con vitalidad, el momento a vivir es el presente en todas las facetas. Por eso vivir, es vivir aquí y ahora. Tú ¿dónde sueles vivir?
Haz una prueba y observa hoy en diferentes momentos en que te acuerdes o ponte una alarma cada hora ¿dónde está mi mente? ¿En el `pasado, en el futuro? ¿Está divagando en mil pensamientos o preocupaciones? ¿Pensando en lo que haré más tarde? Descubre cómo vaga nuestra mente cuando no le damos un propósito. Te aseguro que te sorprenderás.