¿El Presente es el camino?
Comentario de Isabel Hdez. Negrín, España
Estar presente es la única vía para una vida saludable y feliz. Vivir ligado a la conciencia sobre los registros que uno va teniendo a lo largo del día, en cada momento del día, es el camino. Estar presente o sentirme presente, es fruto de mi propósito voluntario y cotidiano. A nadie le tocan con una varita mágica que le cambia la vida. Revivir el propósito cada día es el único acto profundo que a uno le pone en sintonía con aquello que ha elegido: vivir en paz, vivir feliz y saber cómo hacerlo.
La varita mágica la llevamos puesta y es la de revivir el propósito. Es como si fuera el “pago” y la llave necesaria para saber manejar la propia vida. No es gratis, pero es posible si para uno es lo suficientemente importante como para encarnar ese propósito cada día en nuestros actos cotidianos. Si nos sentimos llamados a mejorar nuestra vida y estamos dispuestos a superar la pereza de los hábitos viejos, nos sentiremos liberados de la tradición, de los hábitos tóxicos que adquirimos, de las creencias y prejuicios, y de la ignorancia sobre nosotros mismos.
Todo empieza por el propósito firme y sentido, no impuesto por el deseo de placer, de hacer las cosas de otra manera y de seguir cotidianamente a donde me lleve ese propósito.
¿Puedes decirme que hay algo mejor que eso? Medítalo bien antes de responder. ¿Quién va a responder? ¿El hábito perezoso o el intrépido explorador que también llevas dentro?
